Roguemos al Señor que tengamos esta fuerza, esta capacidad y la presencia del Espíritu Santo para que podamos con mucha tranquilidad, con mucha madurez ir poco a poco pasando los desafíos y con la fuerza del Espíritu podemos lograr muchas cosas. Señor Jesús en su infinita misericordia te pedimos tu santa bendición para nosotros que somos misioneros tuyos y para todas las personas creyentes que a pesar de los desafíos anuncian tu Palabra, tu Verdad, tu Vida, tus enseñanzas. Que Dios bendiga mucho a cada uno de nosotros, misioneros y misioneras del Padre. Un abrazo grande y que Dios y la Santísima Virgen María siempre los acompañe.