Señor Jesús, al reflexionar sobre mi vida, me doy cuenta de que ha habido tiempos de luces y tiempos de sombras. Te pido por todos los que hoy atraviesan la oscuridad, para que puedan tener esperanza por las promesas de Jesús. Te pido también por todos los que disfrutan de la alegría, para que puedan dar gracias por las bendiciones de Dios. Amén.