Dichosos los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los cielos.
Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad
Los que cumplen la voluntad de Dios son hermanos y hermanas de Jesús
El Señor es mi luz y mi salvación
Muéstranos, Señor, tu misericordia
Señor se recuerda siempre de su alianza
Juan, el testigo del Cordero de Dios
Levántate, toma tu camilla y vete
El Señor no se olvida de su alianza
Diste a tu Hijo el mando sobre las obras tus manos