Oremos con el salmista de hoy: Alaben al Señor, porque es bueno; alaben su nombre, porque es amable. El escogió a Jacob, a Israel como posesión suya… El Señor es grande, nuestro Dios, más que todos los dioses. El Señor hace todo lo que quiere, en el cielo y en la tierra. Alabemos al Señor, porque él es bueno. Amén (Salmo 134).