Pidamos al Señor para que nos enseñe a perdonar. Conocemos que nuestro Dios es el señor compasivo y misericordioso, lento a la ira y rico en clemencia. Enséñanos a amar y perdonar como tú nos amas y perdonas. “Perdona nuestras ofensas como también nosotros perdonemos a los que nos han ofendido”. Amen.