Señor Jesús, tú que fuiste una total entrega para tu Padre, concédenos a nosotros aprender de tu ejemplo y así poder expulsar nuestros malos espíritus, a la vez ayudar a otros con nuestro testimonio, y ellos se sientan invitados a hacer lo mismo en sus vidas; con tu infinita misericordia y poder haz dócil a la humanidad a escuchar tu palabra y seguirte. En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo. Amen