Hoy Jesús está seguro de venir a nosotros. ¿Estarán nuestras mentes, ojos y corazones abiertos a su venida? Él vendrá; sin embargo, tenemos que estar atentos y despiertos hasta su venida definitiva,
Que el Señor Jesús Resucitado nos ilumine y nos guie para que nuestra confianza en Él sea total y comprometida a trabajar por su Reino.