pidamosle a Jesus que nos ayude a escuchar y aceptar el mensaje que Dios nos quiere dar. Que sepamos valorar el echo que podemos tener a Dios mismo presente a través del Santisimo Sacramento y orar ante el. Entonces, mis queridos hermanos, los invito a que escuchemos la palabra de Dios y la pongamos en práctica, siendo mensajeros de Jesucristo, ya que es nuestra misión desde nuestro bautismo. Que Dios los proteja y los llene de bendiciones.