Señor de los ejércitos, que pones a prueba al justoy conoces lo más profundo de los corazones,haz que los creyentesden con gozo su testimonio de Cristo en el mundo. A ti encomendamos la causa de todos los que en la Iglesia ejercen liderazgo y de todos aquellos cristianos que en el mundo anuncian la justicia. Que sean siempre confortados por Cristo y que el Espíritu Santo les de la fuerza para nunca desfallecer. Amén.