“Dios y Padre nuestro, Tu ayudaste a San Marcos el evangelista con Tú gracia para que pudiera predicar las Buenas Nuevas de Cristo. Ayúdanos a conocerte bien para que podamos vivir fielmente nuestras vidas como seguidores de Cristo”. Amén.
Oremos a Jesús de la Misericordia: Jesús mío, ilumínanos con tus rayos divinos, e Envíanos tu luz desde el cielo para que podamos seguir trabajando por la paz en nuestro mundo. Amen
Pedirle al Dios de la vida que seamos capaces de proclamar no la incredulidad, no los fracasos, sino que seamos capaces de proclamar con nuestras vidas la resurrección, la vida, el seguir creciendo, el seguir amando, el proclamar esperanza, el seguir creciendo.
Oh Jesus, que moriste y resucitaste por amor, aleja de nuestras familias y de la sociedad todas las formas de desesperación y desanimo, para que vivamos como personas resucitadas y seamos portadores de tu paz. Amen.
Vamos a pedirle al Señor que, así como se apareció a sus discípulos y les ofreció Paz; hoy se haga presente en nuestras vidas y nos llene de paz de esa paz duradera, de esa paz que nos da esperanza del futuro.
Que este camino catequético que San Lucas nos narra hoy nos mueva a vivir con entusiasmo la Resurrección del Señor, que perseveremos en la instrucción de las Santas Escrituras, que no faltemos a la Fracción del Pan, la Santa Misa, y que como Jesús, acompañemos a los que por la vida van tristes y sin sentido. Pidamos todo esto al Padre, en el nombre de Jesucristo Vivo, y del Espíritu Santo, Señor y Dador de la Vida. Amén.
Señor Jesús, aquí, en medio de tanta desolación, incertidumbre, sentimientos encontrados y ansiedad, guíanos para encontrarte a Ti en nosotros mismos y en todos aquellos que están sufriendo, tanto espiritual como corporalmente. Guíanos y haznos arcilla suave en Tus Manos Preciosas para que podamos ser dóciles y servir de la manera que Tú deseas que sirvamos.
Oremos con el Salmo de este dia: Proteje Señor a los que esperamos en ti. Enseñame el camino de la vida, sáciame de gozo en tu presencia y de alegría perpetua junto a ti. Amen
El primer día después del sábado, estando todavía oscuro, fue María Magdalena al sepulcro y vio removida la piedra que lo cerraba. Echó a correr, llegó a la casa donde estaban Simón Pedro y el otro discípulo, a quien Jesús amaba, y les dijo: “Se han llevado del sepulcro al Señor y no sabemos dónde lo habrán puesto”.
Pedimos Padre Santo que nos dé la paciencia de Jesús, su amor, su sentido de entrega. Y llévanos Padre a celebrar la resurrección del Señor con gran aprecio por la gloria de la cruz de Cristo que nosotros
hemos honrado y adorado en este Viernes Santo. Amén.
Oh Dios, al congregarnos como familia creyente, concédenos, te rogamos, que, por esta celebración solemne de la Palabra, en la que tu Hijo nos encomendó el gran mandamiento del amor, seamos fortalecidos en la caridad. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.
Señor Jesús, hoy me propongo solemnemente visitar tu templo, con reverencia y santidad vivir contigo estos días memoriales que nos acercan a tu presencia; permite que mis fuerzas sostengan cada cometido de unión a ti, gracias por habernos dejado la herencia de ser hijos de Dios como tú . Gracias por tu amadísima presencia y amor sin condición. Amen
Pidámosle al señor que nos ayude a encontrar el propósito, nos ayude a encontrar la misión que nos tiene así con dificultades y problemas, seremos cada vez más fuertes.
Oración Pidámosle al Señor, nos ayude a disfrutar esta vida con nuestros seres queridos y a ser perfume en ella para que los demás sientan ese aroma del mismo Señor.
Domingo de Ramos
“De la pasión del Señor”
Pedimos a Dios que nos ha unido en una nueva alianza de paz, nos ayuda a pasar este momento de sufrimientos por este virus, con una esperanza cierta de resucitar con El en una nueva vida con un nuevo propósito de vivir en la unidad y amor fraterno, luchando por un común interés con un solo corazón y de muchos rostros para su Gloria por los siglos de los siglos…. Amen
Luego regresó Jesús al otro lado del Jordán, al lugar donde Juan había bautizado en un principio y se quedó allí. Muchos acudieron a él y decían: “Juan no hizo ningún signo; pero todo lo que Juan decía de éste, era verdad”. Y muchos creyeron en él allí.
“Yo les aseguro: el que es fiel a mis palabras no morirá para siempre”. (Jn 8,51).
pidamos a Dios para que nos ayude a renovar y transformar nuestra vida para que seamos auténticos discípulos de Jesús en nuestra familia y en nuestros hogares.
Les deseo que estos últimos días de cuaresma en este ano, que son muy diferentes como otros años, nos podemos acercar mas a nuestro Dios, y ver su presencia del amor en los próximos días en nuestra vida.
Aquí estamos, Señor Espíritu Santo. Aquí estamos, frenados por la inercia del pecado, pero reunidos especialmente en tu Nombre. Ven a nosotros y permanece con nosotros. Dígnate penetrar en nuestro interior. Enséñanos lo que hemos de hacer, por dónde debemos caminar, y muéstranos lo que debemos practicar para que, con Tu ayuda, sepamos agradarte en todo. Amén.
En aquel tiempo, se encontraba enfermo Lázaro, en Betania, el pueblo de María y de su hermana Marta. María era la que una vez ungió al Señor con perfume y le enjugó los pies con su cabellera. El enfermo era su hermano Lázaro. Por eso las dos hermanas le mandaron decir a Jesús: “Señor, el amigo a quien tanto quieres está enfermo”.
Senor, ayudanos a realmente escuchar tu palabra y la de tus profetas. Que no seamos como ese pueblo y los fariseos que no creen en la Buena nueva que nos revela Jesus. Que al contrario, seamos misioneros de tu palabra y compartamos tu palabra con una profunda devocion. Amen. Que tengan una bonita semana. Gracias.
Jesús es libre de este miedo, y en la segunda parte de hoy, los judíos -los suyos-, hablan como la gente de este mundo, no pensando en Dios, él es de Nazaret ¿entonces no puede ser Mesías? -pensemos diferente-. Que nuestra vida, que la vida de todos nuestros hermanos, de toda nuestra familia la vida humana es el don mas grande que tenemos y viene desde arriba como lo dice Jesús: “del mismo Dios”, muchas gracias para todos, amen.