Padre celestial quiero que cada día nosotros, nuestros hermanos sigamos tus enseñanzas las que nos dejaste en medio de la Eucaristía pare que cada día tengamos el conocimiento de que tu Eucaristía es la gran herencia que nos dejaste aquí en la tierra para que cada día crezcamos como hermanos y como amigos. Que esta Palabra que hoy tenemos acreciente día a día en nuestro corazón. Amén.