Apoyemos el grito del Papa Francisco de Cuidar Nuestra Casa Común ya que aún es tiempo de hacer algo por ella. Que los frailes menores, los capuchinos, los conventuales, las hermanas Clarisas y la Orden Seglar nos ayuden a dar testimonio de la grandeza espiritual de San Francisco, cuidando nuestra casa común y velando por la vida digna de todos, especialmente los pobres y los enfermos. Amén.